La difícil situación del país separó a Gabriela Montes de Oca de sus seres queridos unos 7.300 kilómetros hacia el sur del continente. Su familia viven en los Altos Mirandinos, mientras que ella emigró a Buenos Aires. Lo que le permite salvar esa distancia son las llamadas por Whatsapp y los chats. Las fallas en las operadoras telefónicas no juegan a favor de la joven venezolana ni de los suyos.
Julett Pineda Sleinan | @JulePineda
La aplicación disponible para equipos Android, iOs y Microsoft ha ayudado a aquellos que han emigrado a sentirse más cerca de sus seres queridos que permanecen en suelo criollo. Desde Argentina, Gabriela aseguró a Efecto Cocuyo ser una usuaria frecuente de Whatsapp y de FaceTime, una plataforma de videollamadas solo disponible para iPhone.
“Lo que hago es hablar con ellos por ahí y comprar tarjetas para llamar al exterior, como se hacía antes, cada vez que quiero hablar con mi abuela y gente que no tiene computadoras ni celulares inteligentes”, contó. “Compro la tarjeta, que cuesta 35 pesos, y se la meto al teléfono. Tiene como 90 minutos para hablar”, añadió.
Diego Bonilla y Vivian Reglá, estudiantes venezolanos en España, también optan por usar la aplicación gratuita para chatear o hacer un contacto rápido con sus hogares en Caracas. “Ahora, con la actualización de Whatsapp, soy fan de las videollamadas”, aseguró Vivian, quien se mudó a Barcelona a finales de 2016. Cuando las llamadas son “para rato”, la joven prefiere hablar con su mamá vía Skype.
Las llamadas internacionales a Venezuela solo las hace desde casa de su papá, en tierra catalana. “Es muy caro. No gasto dinero de mi línea en eso”, indicó. Esos casos especiales y “cariñosos” por las facturas solo los aplicaba para hablar con su abuela. Desde que comenzó 2017 no lo ha vuelto a hacer porque la señora recibió un smartphone en Navidad para comunicarse con sus nietos por una vía menos costosa.
En abril del año pasado, las operadoras telefónicas se ajustaron los pantalones. Ante la creciente crisis de divisas y la creación de la tasa Dicom con el dólar flotante, Movistar y Digitel anunciaron la suspensión del servicio a larga distancia internacional. En aquel momento, Digitel informó que tomaba la medida “debido a la imposibilidad de establecer acuerdos con sus proveedores en cuanto a la extensión de los plazos para la cancelación de los servicios prestados por estas compañías, los cuales son pagados en divisa extranjera”.
Las operadoras telefónicas informaron sobre sus deudas con proveedores internacionales que -según ellas- ascienden a “decenas de millones de dólares”. Sin embargo, la respuesta de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) fue demandar de las compañías una “actitud proactiva” frente a la problemática.
Muy poco ha cambiado desde entonces. De acuerdo con Fran Monroy, comunicador social especializado en informática y telecomunicaciones, las llamadas internacionales a través de Movistar y Digitel están “prácticamente cerradas”. En el caso de Movilnet, indicó, todavía están disponibles algunos destinos como Colombia o Cuba para realizar llamadas a larga distancia. “A donde hay crédito, te dejan llamar. Y a donde no, no te dejan”, dijo.
La operadora estatal Cantv tampoco se salva de este problema. “Una amiga está aplicando para una universidad acá en España y, cuando llama, suena como si estuviera ocupado”, afirmó Vivian. El especialista indicó que llamar al extranjero y lograr comunicación se ha vuelto una casualidad.
“Cantv tiene ciertos destinos habilitados y con Inter pasa lo mismo. En países donde hay muchos venezolanos que emigraron es más probable que estén activos”, explicó Monroy. “Antes tú podías llamar a donde tú quisieras”.
Además de la falta de divisas, Monroy indicó que hubo una época en la que se registró un “bachaqueo de llamadas desde Venezuela“. “Como los precios en el país eran muy baratos, había llamadas falsamente transadas desde acá por un IP, pero que en verdad se hacían desde cualquier parte del mundo. Eso ocasionó que quedara golpeada toda la industria”, afirmó.
Aún con distintas plataformas y aplicaciones móviles, Venezuela va quedando cada vez más incomunicada. Aunque la tecnología haga las comunicaciones más fáciles, la falta de divisas sigue dándole batalla a las operadoras de telefonía e Internet.
“La calidad de la conexión en Venezuela es mala. Cuando vivía allá y llamaba a mis amigos por Skype, la llamada se caía a cada rato. Todo dependía del día y cómo funcionara el Internet en ese momento”, finalizó Vivian.