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Sin efectivo y  sin gasoil pajeros pasan las de Caín para el retorno a casa

Pasajeros llegan a los terminales a las 4:00 a.m. en la búsqueda desesperada de boletos

El retorno a casa se ha vuelto más estresante que la salida. Pasar la Navidad en Caracas se convirtió en un viaje costoso y angustiante para Iván Morillo, quien lleva tres días tratando de regresar a su natal Maracaibo. En el terminal Oriente Sur, ubicado en Artigas, el pasaje cuesta Bs 210 mil pero solo reciben efectivo. La situación se repite en Expresos Occidente en Prado de María.

En La Bandera tendría que disponer de Bs 300 mil en billetes para poder retornar, por lo que ayer optó por madrugar a las puertas de Aeroexpresos Ejecutivos. La larga espera fue infructífera pues allí le informaron, pasadas las 11:00 a.m, que el punto de venta no estaba funcionando y solo los que tenían Bs 240 mil en efectivo podían subirse al autobús.

“Nos estamos acostumbrando a que nos maltraten. Nos dejan en la acera y a pleno sol haciendo una cola cuando podríamos estar dentro de las instalaciones”, se quejaban los viajeros de Aeroexpresos, que hasta amenazaron con tumbar la reja y trancar la calle mientras coreaban: “queremos pasaje, queremos pasaje”.

Desde el 22 de diciembre, Keny Martínez y Jesús Laguado están tratando de viajar a San Cristóbal. Su periplo por más de cuatro terminales ha sido infructuoso. “En los bancos   te dan Bs 10 mil o 20 mil pero los pasajes cuestan entre 250 mil y 500 mil. En los negocios y en los propios terminales te cobran hasta 70% de comisión para dar avance de efectivo. Están revendiendo el dinero”, se quejaron.

Esta denuncia fue confirmada por Luis Alberto Salazar, presidente del Comité de Usuarios del Transporte, quien precisó que están cobrando 40% de comisión por adelantar efectivo dentro de las mismas operadoras de transporte. “Es un círculo vicioso y especulativo que está al margen de la ley”, dijo Salazar y llamó a denunciar las mafias que operan dentro de los terminales. De acuerdo con sus cifras, durante esta temporada decembrina solo se movilizó 25% de los viajeros acostumbrados.

Usuarios que desembarcaron  en La Bandera provenientes de San Cristóbal y Maracaibo denunciaron que la falta de gasoil mantiene varados a muchos pasajeros. Esto unido a la escasez de autobuses por los altos costos de repuestos y lubricantes. “Como no hay combustible hay personas que deben hacer más de cuatro escalas  para regresar a la capital”, dijo Eleonora Figuera.

Dos pasajes de avión para su mamá y su hermana le costaron Bs 350 mil desde Maracaibo a Caracas, “ahora me sale Bs 200 mil más caro que se regresen en autobús y no encuentro pasajes por falta de efectivo”, dijo Herminia Arroyo, quien lamenta que solo hay dos líneas aéreas viajando al Zulia cuando antes eran unas diez.

Algunos usuarios encuentran “ángeles” que los ayudan a volver a casa con un gesto de confianza. “Me faltaban Bs 70 mil en efectivo y como un pasajero me vio tan desesperada me los prestó. Acordamos que le pago el dinero mañana cuando salga el autobús”, contó Yuliana Tovar, desde el terminal de Bello Campo.

 

En Expresos Flamingo los que buscan boleto llegan a las 4:00 a.m. y se anotan en una lista. Manuel Rodríguez llegó a las 4:30 a.m. y ya se le habían adelantado setenta personas. Sin embargo, pudo comprar pasaje para San Cristóbal. Pagó Bs 320 mil y canceló con punto de venta. “Te venden para el mismo día, los autobuses salen a las 4:40 de la tarde. Hoy habilitaron cuatro unidades para San Cristóbal, una para Maracaibo y otra Barinas”.

En Rodovías de Venezuela es posible adquirir boletos para el Oriente del país con tres días de anticipación por eso las colas se mantienen durante todo el día. “Hay dos puntos de venta, pero se ponen lentos, a veces son las 10:00 pm y todavía se están facturando pasajes. Hoy a las 12 del mediodía cerramos la cola. Atendemos unos 600 pasajeros al día”, explicó Emilio da Silva, encargado del terminal que hace cinco años contaba con 106 unidades pero que en este asueto decembrino está trabajando con 27 autobuses.

“Por la falta de repuestos y los altos costos hay unidades que quedan inoperativas por muchos días”, explicó Silva.

El Universal

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