Los niveles de producción de la industria de autopartes en 2018 serán similares a los del año pasado, destacó el presidente ejecutivo la Cámara de Fabricantes Venezolana de Autopartes, Omar Bautista, quien destacó que el ensamblaje de automóviles disminuyó en 99%, por lo que el último período anual cerró en 2 mil unidades, lo cual representa un rendimiento del 1%.
“El año 2017 fue muy difícil para la industria nacional de autopartes. Tuvimos que trabajar a 20% de nuestra capacidad instalada, un nivel bastante bajo”. El problema se debe a que Sidor distribuye solo el 4% de los insumos y cree que debe reestructurarse para contar con la posibilidad de disponer de suficientes materias primas e insumos para incrementar la producción.
Recordó que el parque automotor está afectado por la falta de repuestos, elevados precios y pérdida del poder adquisitivos de los ciudadanos. Bautista informó que tienen su basamento en “estudios que hemos hecho…con información de la Cámara Nacional de Talleres Mecánicos, Cámara Nacional de Transporte, estudios de Pdvsa, consumo de lubricante y combustible. Estimamos que alrededor de 1 millón de vehículos no están rodando”.
Muchos vehículos están guardados en talleres o en los hogares de los propietarios, evitando de esta manera que sean hurtados, y a la espera de poder conseguir repuestos a precios asequibles, precisó Bautista, cuyo sector provee de equipos originales de reposición a la industria ensambladora nacional, postrada también, pero que en la actualidad sufre un serio “problema de estancamiento”.
Ante el panorama descrito por el representante de Favenpa, se evidencia que la posibilidad de adquirir un carro nuevo actualmente es una tarea descrita como “imposible”. Entre tanto, yendo más allá, tratar de conseguir las piezas de reparación para las unidades existentes es descrita por los usuarios como toda una “odisea”.
El Tiempo de Valera