Cuando analizamos los efectos que han tenido en la Nación, estos 20 años de Socialismo del Siglo XXI o el denominado Plan de la Patria con sus dramáticas consecuencias en lo Social y Económico. Cuyos resultados antagónicos sé hacen evidentes en cada una de las familias Venezolanas.
Voceros oficiales insisten permanentemente en dar a conocer cifras de los avances logrados en niveles de alimentación, salud, reducción de pobreza y un sin número de beneficios que nos ubican dentro de los países del mundo con mayores mejoras en calidad de vida para sus ciudadanos.
Todo lo cual es antagónico a las realidades observadas y para lo cual presentaremos cifras, que hacen evidentes las profundas desmejoras existentes en lo económico y social que nos ubican en los últimos 30 países del mundo en niveles de desarrollo humano y calidad de vida.
En lo social.
Los niveles de crecimiento de la pobreza y la caída en el consumo de alimentos y medicinas demuestran resultados contrarios a los anunciados por voceros oficiales en las mejoras obtenidas para la población.
En pobreza pasamos de apenas un 25% en diciembre del 1998 a acercarnos al 90% en enero 2019. La caída del consumo en alimentos esenciales nos indica lo difícil que resulta para la gran mayoría de las familias consumir carne, pollo, pescado o leche. Donde hoy ese consumo es apenas un 20% o menos de los niveles del año 1998. Lo mismo sucede con las medicinas donde la escasez de las de mayor uso se hace evidente así como su costo de adquisición.
Observándose preocupantes niveles de faltas de medicamentos y servicios de cirugía en nuestros hospitales públicos, que es a donde recurre la gran mayoría de la población para obtener tratamiento a sus enfermedades o intervenciones quirúrgicas.
En lo económico.
Los efectos en la economía lo observamos en la caída del producto interno bruto, el cual se redujo en más del 50% en los últimos 6 años. Siendo la más evidente la existente en el complejo empresarial público, donde se observan disminuciones de entre 70% y 80% de los montos por ellas producido al compararlas de cuando estaban en manos privadas.
Esta reducción en cantidades obtenidas por la casi totalidad de esas empresas públicas, han sido los causantes de los altos niveles de escasez al su volumen de toneladas haberse reducido año a año en los últimos 8 años y observarse como buena parte de lo producido por ellas ha desaparecido casi en su totalidad de la cadena comercializadora.
La reducción de la actividad económica nos ubica como el país con el más elevado nivel en disminución del PIB. Como consecuencia de la caída de la producción nacional y las importaciones lo cual ha tenido sus graves incidencias en el consumo al ubicarnos en este momento dentro de los 20 países del mundo con tan altos niveles de escasez.
Encontrándose la economía del país en una compleja situación con casi el 50% de las empresas paralizadas y buena parte de las demás con niveles de un 20% o 30% de su capacidad productiva.
Hoy los volúmenes de exportación de petróleo y otros recursos naturales están en sus más bajos niveles históricos, lo cual incide preocupantemente en la caída de los ingresos públicos.
A pesar que nos han ingresado por venta de petróleo, oro, ventas de activos externos y créditos internacionales unos 1.6 trillones de $ en estos 20 años, hoy no tenemos ningún ahorro o fondos de reserva como consecuencia del manejo manirroto de esos recursos, lo cual resultó inconveniente al interés nacional.
Razones por lo cual se está sosteniendo buena parte del gasto público vía financiamiento del Banco Central el cual alcanza a cubrir hasta un 80% del total de las necesidades financieras del Gobierno, con sus graves consecuencias en el crecimiento de la hiperinflación(es la mayor del mundo) considerada es la principal causa de la pérdida del poder adquisitivo de las familias, limitando más aun su capacidad de consumo y como consecuencia creando altísimos niveles de pobreza.
Los números así nos lo indican.
Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución.