Inicio > El pizarrón de Fran > El pizarrón Opinión > Rubén Contreras: El ataque cibernético a Venezuela

Rubén Contreras: El ataque cibernético a Venezuela

 

Cada día que acontece en nuestra Venezuela actual, los ciudadanos somos sorprendidos por la inconmensurable capacidad creadora de quienes dirigen el narco gobierno, así como el rol del inefable y taimado psiquiatra, actual ministro de información y comunicaciones, el  cual nos deslumbra con nuevas artimañas, tratando de justificar el desastre cometido a los largo de estos nefastos años del socialismo del siglo XXI, quien ha resultado un incomparable alumno del nazismo liderado por Hitler y de su ministro de propaganda Jose Goebbels.

La última mentira creada y esbozada por el régimen, a raíz del desastre cometido con el sistema eléctrico venezolano, fue el supuesto ataque cibernético, el cual técnicamente ha sido acuciosamente desmontado por los ingenieros venezolanos especialistas en el area de la electricidad, pero es que por el ser poseedores de la hegemonía comunicacional, han sido contumaces propagandistas, gracias a la sala situacional instalada en Miraflores para inventar fabulas cada día, a fin de demostrar que la culpabilidad de los males que sufrimos los venezolanos, es por culpa del imperio mismo y de la derecha apatrida.

Es posible que algunos recuerden la denuncia del Pedro Carreño, quien dijo que los Yanquis nos espiaban a través del DirecTV, ya el anunciaba el espionaje cibernético, el cual dió su primer zarpaso cuando este nefasto personaje desapareció el billón de bolívares que le asignó el estado para llevar a cabo las obras del Plan Vargas en el 2005.

El caso es que llevamos 20 años de ataques cibernéticos, desde que asumió el poder el destructor de Sabaneta, cuando creó el Plan Bolívar 2000 y lo puso bajo la administración de la peste militar que lo había acompañado en el golpe del 4 de febrero de 1992. De eso tenemos caos emblemáticos liderados por Cruz Wefer en Fondur y Fariñas en el FUS, continuando con un rosario de robos al erario público, como los cometidos por los generales con apellido Osorio, quienes manejaron conjuntamente con María Gabriela, la hija del felón, el negocio de los alimentos de Pudreval y las compras a Argentina, Uruguay, Bolivia y Nicaragua, entre otros países.

Otro despiadado ataque cibernético contra el país fue el cometido con el método Chaz, cuando se le despojó y robo a la familia Azpúrua su hacienda La Marqueseña en Barinas, al cual continuaron los hatos El Frio, El Charcote, El Cedral, El Frio, La Vergareña, El Piñero y otros, que eran los grandes productores de leche y carne en nuestra Venezuela, así como lo acontecido con las haciendas plataneras ubicados en la zona sur del lago de Maracaibo.

Después de esto, los desalmados científicos de la Nasa, ordenados por el imperio continuaron induciendo y alimentado soezmente la mente destructora del intergaláctico y le conminaron el ataque cibernético contra las plantas arroceras, los centrales azucareros y las procesadoras de maíz, para que el gobierno impusiese en la mesa de los venezolanos, la escasez de esos rubros.

En el campo de la producción de hidrocarburos, así como en la generación de acero y del aluminio, al igual que de la electricidad, el ataque ha sido permanente. Aquí el creador cibernético más significativo fue Rafael Ramírez, sobrepasando a Gastón Parra y a Rodríguez Araque, conocido en los bajos fondos como el comandante Fausto, ya que pulverizaron la industria petrolera, acabaron con la internalización de la misma iniciada con la compra de la Veba Oíl a Alemania y luego con La Citgo, en tiempos de Luis Herrera Campins, así como con la Orimulsión.

El ataque cibernético a la generación de electricidad ha sido producido al estilo de la guerra de las galaxias, al extremo que fuentes calificadas como Orlando Zamora en la obra: Revés de un Sueño Prota-Agónico, disecciona el gobierno del intergaláctico y señala que durante los 40 años de la cuarta república, se invirtieron 48 mil millones de dólares en la construcción de la infraestructura hidroeléctrica y termoeléctrica y solamente a partir del 2009, cuando se produjo el primer apagón, el felón de Sabaneta dispuso de 100 mil millones de dólares para mejorar el servicio eléctrico con la construcción de los complejos eólicos de Paraguaná y Macanaó, de los cuales si acaso quedan las vallas oxidadas, así como la compra de termoeléctricas a Cuba, que terminaron convertidas en chatarra, como las ubicadas en el canódromo de Pampatar, para que el ciudadano común apreciase la inversión ordenada por sus secuaces, lo que ha originado el enriquecimiento de los boli burgueses con cuentas en los paraísos fiscales.

Igualmente José Curiel y Oswaldo Páez Pumar en la obra, del Pacto de Punto Fijo al Pacto de La Habana, fotografiaron a toda Venezuela comparando las obras de infraestructura construidas durante la cuarta república, con las construidas por el socialismo del siglo XXI  y la disparidad es como de aquí a la luna, al extremo que de las obras proyectadas para concluir la generación de hidroelectricidad en el Rio Caroní, ninguna ha sido iniciada, al igual que tampoco han podido poner a funcionar la represa La Vueltosa del complejo Uribante Caparo, lo que nos indica que el ataque cibernético a este sector ha sido uno de los más despiadados; y con la relación a la infraestructura vial, se paralizó completamente como es el caso de la autopista José Antonio Páez, la Antonio José de Sucre y San Cristóbal-La Fría. Y si hablamos del ferrocarril, el mejor testimonio cibernético lo explican quienes viven en Valencia y Maracay, quienes diariamente observan cómo se oxidan las partes metálicas de los  tramos construidos, así como el viacrucis que experimentan cada día los Tuyeros que deben abordar el tren que, los debiese de traer  a Caracas de los Valles del Tuy y viceversa, el cual es más de las veces que está paralizado que funcionando y  otro ejemplo, lo perciben quienes diariamente pasan por Guarenas y Guatire con  la paralización de las obras del metro.

En el campo de la educación, la ciencia y tecnología, el mejor reflejo del ataque cibernético está en el corte presupuestario destinado a la investigación, al extremo que la diáspora de investigadores idos a otros países supera el 50% de la plantilla de las universidades y del IVIC, instituciones totalmente menguadas, cumpliendo prácticamente una función vegetativa al no poder realizar la misión para la cual fueron hechas.

 

En tal sentido, después de observar las elucubraciones de este narco hampo ducto traficante de estupefacientes, instalado en Miraflores, así como el talante indiscriminado basado en sus mentiras, consideramos nosotros, que esa capacidad creadora supera la obra de Gabriel García Márquez que le permitió ganar el nobel de literatura con 100 Años de Soledad, en el cual creó el idílico y maravilloso pueblo de Macondo y pudiéramos decir también, que superan la sarta de mentiras expresadas por Eduardo Galeano, cuando escribió el adefesio de las venas abiertas de América Latina, pero estos hampones, no tienen la catadura del Galeano, que al revisar en el ocaso de su vida esa obra escrita, hizo un mea culpa pidiéndole excusas a todo aquel que hubiese leído ese libro, ya que el mismo fue escrito con la pasión de su juventud, sin tomar en cuenta fuentes documentales serias y confiables y se basó en supuestas confidencias y datos aportados por sus compañeros influenciados por el sarampión del socialismo real y del mayo francés.

Te puede interesar

Cargando...
Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *