En 25 días entrará en circulación el nuevo cono monetario, según anunció el presidente Nicolás Maduro en cadena nacional la noche del miércoles 25 de julio. Pese a que los economistas coinciden en que los nuevos billetes, que van desde los 0,50 bolívares soberanos hasta los Bs.S 500, facilitarán las formas de pago, insisten en que la medida no frenará la pérdida del poder adquisitivo de los venezolanos.
“Lamentablemente, no se está haciendo nada para aliviar la causa ni corregir el problema, que es la hiperinflación“, aseguró la economista Sary Levy.
“En principio se le iban a quitar tres ceros a la moneda. Ahora son cinco y puede que para el 20 de agosto, cuando entre en vigencia el nuevo cono monetario, sean seis ceros menos. La aceleración hiperinflacionaria es un hecho”, añadió la también docente universitaria.
Rosamnis Marcano, economista de la firma Econométrica, insistió que el nuevo cono “no resuelve el problema de la inflación” y que, para frenar el aumento de los precios, es necesario que el Gobierno reduzca el déficit fiscal. ¿Cómo? Con medidas como la producción de nuevas entradas de divisas, el financiamiento externo, los ajustes de servicios y la eliminación de los subsidios.
Con la reconversión monetaria, el ingreso total mínimo de los venezolanos pasará de ser Bs. 5.196.000 a ser 51,96 bolívares soberanos. No solo la cifra se reduce, sino también el poder adquisitivo de quienes perciban el salario.
“Esos 51,96 bolívares soberanos van a tener menor poder de compra de aquí al 20 de agosto. El salario mínimo ya no alcanza para costear la vida y el Gobierno ha pasado de aumentar el sueldo a optar por la asignación de bonos“, precisó la investigadora de Econométrica.
Marcano subraya que la reconversión monetaria era necesaria “desde hace mucho tiempo” porque los sistemas de pago electrónicos se estaban viendo afectados por la cantidad de ceros en los montos. “Vemos que hay que pasar la tarjeta varias veces por un punto porque hay un límite (para los montos)”, agregó.
Sin embargo, ve difícil que en poco menos de 30 días haya la cantidad de efectivo suficiente para abastecer el sistema económico venezolano e introducir una nueva familia de billetes que reemplace al cono actual.
“Es probable que posterguen la reconversión nuevamente. Cuando tienes cinco ceros de diferencia se hace casi inviable que convivan las dos familias de billetes. El nuevo cono va a tener que reemplazar por completo al ya existente”, explicó Marcano.
Levy no lo ve inviable, pero insiste que debería darse un período de convivencia para la transición y que debería haber una diferencia muy clara entre los dos conos. “Unos billetes van a quedar para unidades muy pequeñas y otros para unidades muy grandes”, dijo.
El pago de los servicios, como aseo, agua y gasolina, es una de las grandes interrogantes que ha dejado el Gobierno desde que anunció la reconversión monetaria, primero de tres ceros y ahora de cinco. La pieza de menor denominación, de 0,50 bolívares soberanos, sigue estando por encima del precio actual del combustible.
No obstante, las economistas consideran que la llegada del nuevo cono monetario trae consigo un aumento “implícito” de este tipo de servicios.
“Lo que va a ocurrir es que o se va a aumentar el servicio o se deja gratis, como ocurrió con el Metro de Caracas en el último caso. No hay manera de cobrar el litro actual de gasolina en bolívares soberanos. Con lareconversión monetaria se están ajustando los servicios de forma implícita”, precisó Marcano.
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